sábado, 27 de febrero de 2010

On the road again

Hacía ya varios meses que no publicábamos nada en el blog. No ha sido por falta de actividades, sino por falta de tiempo. Entre el trabajo y la familia a veces no hay huecos. Gracias a los que se preocuparon por nosotros (un saludo a Biker Solitario, al otro lado del Atlántico). Ahora mismo os pongo al día.

Por lo pronto, Xavi y tomás participaron como equipo en la IV edición de las 3 horas de Arenys de Munt, una competición tipo relevos en circuito cerrado. Buena actuación para dos novatos en este tipo de competiciones, que por lo visto tuvo un nivel general considerable. No sé si el formato es el que le gusta más a Xavi, pero él por el momento va probando cosas, Cualquier día lo vemos en un Ironman. Tomás, por su lado, pudo comrpobar qué se siente al vestir la elástica del equipo. No le queda mal el negro y seguro que se vió bien.

Cambiando totalmente el registro, mi familia y yo nos fuimos unos días a la montaña aprovechando días libres a inicios de diciembre. Fuimos a Sant Iscle de Colltort, en Girona, a una casa rural muy chula que además estaba muy cerca de la vía Verde del Carrilet. Estrené baca en el coche y portabicicletas (gracias a un arreglo de última hora que me hiczo Francisco): mucho mejor y más seguro que el portabicicletas de portón trasero que utilizaba antes. Pudimos pedalear los tres juntos en una vía perfectamente acondicionada, con un entorno impecable y con una inclinación prácticamente nula, con lo que los niños la asumen la mar de bien. Muy recomendable para grupos con gente de diferente nivel. Estoy preparando otra salida a la Vía Verde de Berga, más corta pero más agreste (tiene el túnel más corto de Europa), a la que podemos llegar en un par de horas, hacerla y volver a casa o quedarnos a comer por ahí. Ya os iré informando.

Como no podía ser de otra manera, Xavi cambió la bici por una más adecuada a su nivel. Así que en el grupo ha habido cambios. Xavi compró una Cube preciosa, yo me quedé con la suya, Francisco se quedó con la mía y la de Francisco aún no sabemos dónde acabará. El caso es que salimos a estrenar los cambios (Sergi, Franciso y yo) a uno de los recorridos que hacíamos al principio de empezar a salir, por la riera de Riudemeià hasta Òrrius. Francisco rompió la cadena (cada salida tiene su momento mecánico...) y nos entretuvimos un rato, pero pudimos seguir. Algunos inventos en el recorrido (marca Sergi) nos hicieron sufrir más de lo previsto en alguna subida. Ya de bajada, descubrimos que debían de estar vaciando la piscina municipal en la riera de Clarà, que iba llena de agua. Creo que es la única vez que he disfrutado de verdad bajando esta riera, que siempre está muy arenosa y complicada de pedalear.








De momento he dejado de ir al trabajo en bici. Este invierno está siendo especialmente frío y lluvioso y la verdad es que apetece poco mojarse y pasar frío a las seis de la mañana. Ayer ya se notó una temperatura más agradable. Mañana mismo engraso la bici...

Nos vemos!.

1 comentario:

Carlos Rivas dijo...

vaya!!! que bien que están de vuelta, ya me habían preocupado.
Actualizar el blog es a veces tedioso, lo se, pero ya que haces costumbre es fácil, déjame recomendarte el windows Live Writer, te hace las cosas infinitamente mas fácil, quizá le quite un poco lo complicado a la creación de entradas en el blog.

un saludo desde La Paz Mexico