Descubriendo rutas

El sábado pasado salí nuevamente solo (ya le estoy cogiendo el gustillo...) y decidí hacer una ruta que bajé de internet días atrás (y eso que no me gusta aventurarme mucho cuando voy solo...) La ruta discurre por una zona que todavía no hemos recorrido, que se inicia en el final del carril bici que cruza las Cins Sènies. Desde allí puede llegarse al GR que lleva al Canigó, que es la pista que va desde Can Bruguera hasta el Santuari del Corredor (tantas veces cruzada por el equipo). Pude seguir el track hasta llegar a dicha pista, pero luego me equivoqué y seguí el track de retorno (coinciden en el trazado) en vez de desviarme hacia la izquierda en un determinado momento (cosas de conocer parcialmente el terreno: no miras tanto el GPS). Como que me doy cuenta cuando el GPS me indica que estoy alejándome más de 4 Km del siguiente punto, decido seguir adelante para no tener que volver sobre lo pedaleado y llego a la Creu de Rupit. Desayuno y, en vez de seguir hacia el Santuari del Corredor, como indica la ruta, decido volver por la Roca de la Ferradura (foto) y seguir el itinerario inverso al que me marca el track: es decir, hacer lo que no hice antes de subida. Como el camino me es familiar y en subida, no me fijo mucho en el GPS y vuelvo a perder el trazado. Ya no insisto más y vuelvo hacia casa por el apremio del tiempo, disfrutando del nuevo camino de vuelta ya aprendido. En definitiva, una ruta bastante durilla en su inicio (subidas de desgaste por lo arenoso del terreno) y varios senderos que nos dan opciones mucho más divertidas que la de pasar por Can Bruguera para volver a casa desde el Corredor. Me quedo con ganas de volver a intentar hacer el recorrido completo, porque me da que debe ser muy bonito. No pongo el track porque al ir siguiendo uno ya cargado no registra el que vas haciendo: cosas de la tecnología...

Nos vemos!.